10 consejos para motivar e involucrar a tus consultores

La consultoría es una industria que experimenta tasas de deserción muy altas, del orden del 15% al 20% anual. A medida que la guerra por el talento continúa, debemos colocar la motivación y el compromiso de nuestros empleados en el centro de las preocupaciones de la gestión, para mantener nuestra fuerza laboral el mayor tiempo posible.

La motivación y el compromiso de los empleados promueven, además de reducir los costes de contratación y formación, la satisfacción del cliente y la productividad gracias a una plantilla mejor formada.

Aquí hay 10 consejos para motivar e involucrar a sus consultores:

1. Proporcionar a la dirección los medios para involucrar y motivar a sus equipos.

Saber involucrar a tus equipos es una habilidad esencial pero esto no sólo se adquiere sino que también depende de la cultura de la empresa. La alta dirección debe comprometerse plenamente con este objetivo de contratar consultores. Esto requiere desarrollar una cultura corporativa en la que todos los gerentes estén capacitados en habilidades de coaching que hagan que los equipos sean comprometidos y autónomos. Por tanto, es necesario previamente que la organización haya definido y compartido una definición clara de la gestión, sus obligaciones y límites. Sólo a partir de ahí podrá desarrollarse una cultura favorable al compromiso de todos.

2. Siempre más centrado en el cliente

Las organizaciones exitosas son aquellas que colocan al cliente en el centro de su estrategia. Esto es aún más cierto para las empresas y agencias de consultoría cuyo servicio está totalmente centrado en el cliente. El compromiso del consultor debe canalizarse hacia la satisfacción del cliente. Cuando los empleados trabajan para tomar decisiones que ayuden a los clientes, contribuyen a la estrategia y los objetivos de la empresa. Por ejemplo, cuando un cliente está insatisfecho, es importante dar a los consultores las herramientas y los medios para dar una respuesta al cliente y permitirle resolver la situación.

3. Educación continua

Una cultura que promueva el compromiso requiere el fomento de la formación continua. Los empleados deben progresar continuamente para tener los medios para satisfacer siempre mejor las necesidades de los clientes.

Los consultores pueden, por ejemplo, recibir capacitación para responder a las solicitudes de los clientes, recibir capacitación en negociación o resolución de conflictos. Cuantas más herramientas brinde a sus empleados, más confianza tendrán y más innovación tendrán en la forma de satisfacer a sus clientes.

4. Acceso a datos

Los datos son la clave para el éxito de una organización, y cuanto más comprendan los consultores estos datos y cómo impactan a la organización, más ayudarán a mejorarla.

Involucra a tus empleados dándoles acceso a los datos de los proyectos en los que están trabajando. Esto puede abarcar desde temas presupuestarios hasta comentarios de los clientes y tarifas de cobro.

Al darles, por ejemplo, una visión de los índices de carga de trabajo de los diferentes equipos, podrán participar más proactivamente en proyectos futuros para mantener un nivel favorable para la empresa.

5. Contar con una política de mentoría para consultores

Los mentores siempre tienen un impacto favorable para los empleados. Cada consultor debe tener un mentor entre la gerencia para hacerle preguntas o ayudarlo a tomar decisiones que puedan afectar su carrera.

El mentor debe ser una persona que haya podido hacer con éxito las cosas que el consultor está aprendiendo.

Por ejemplo, si un consultor está aprendiendo métodos para responder a un cliente insatisfecho, el mentor debería haber pasado por proyectos durante los cuales haya demostrado su capacidad para resolver situaciones difíciles con el cliente.

6. Crear un entorno en el que los consultores no se sientan en peligro de cometer errores.

Todos cometemos errores cuando asumimos un nuevo rol y es importante crear un ambiente donde el consultor reciba capacitación cuando se cometen errores. Debemos favorecer una retroalimentación muy regular, casi diaria, sobre el trabajo del consultor, ya sea positiva o negativa. Este tipo de feedback es mucho más positivo para el empleado, porque evita sentir el sentimiento de juicio que puede producir el feedback anual o bianual. Te permite adquirir habilidades mucho más rápido y evitar repetir errores. Permite al directivo ser más un entrenador que un supervisor.

Este tipo de entorno alimenta aún más la creatividad y la innovación, porque toda la jerarquía se siente más segura para generar ideas que de otro modo no surgirían.

7. Alinear los paquetes salariales con las necesidades de los clientes

Es importante que los consultores comprendan que su remuneración depende de su trabajo.

Por lo tanto, es necesario alinear los objetivos de desempeño con las expectativas del cliente y monitorear las métricas de desempeño para vincularlas con incentivos. Esto motiva al empleado a tomar las decisiones correctas.

8. Considere las personalidades

A algunas personas les resulta más fácil interactuar con otras. Otras personas demuestran más eficiencia detrás de escena. Pruebe y tenga en cuenta estas diferencias de personalidad para ofrecer los roles adecuados a sus consultores. Utilice pruebas DISC o Myers-Briggs para identificar las fortalezas de sus consultores. Luego, colóquelos en roles que más le convengan, mientras les permite salir de su zona de confort cuando lo deseen.

9. Escribe y comunica los criterios que te permiten ascender en la jerarquía:

La principal razón de la frustración de los empleados es sentirse estancados dentro de una empresa. Es necesario definir muy claramente las razones que permiten evolucionar, ya sean basadas en habilidades o en la consecución de objetivos. En todos los casos, cuanto más comprendan los empleados el funcionamiento jerárquico, más comprometidos y motivados estarán para tomar decisiones que sean favorables para la empresa.

10. El ambiente propicio para el trabajo en equipo.

El ambiente dentro de los equipos es particularmente importante para mantener motivados a los consultores. Corresponde al empleador implementar las acciones necesarias para promover este ambiente favorable. Las organizaciones más planas funcionan mejor y son más productivas, por ejemplo. Favorecer una gestión más horizontal puede promover el compromiso. Configurar una plataforma para trabajar juntos incluso de forma remota también promueve este sentimiento de trabajo en equipo. Finalmente, la organización del team building ha demostrado su eficacia para unir un equipo.